Más artículos


Ayer Nikola Mirotic anunciaba a bombo y platillo que estaba a disposición de la FEB para jugar con España, siempre y cuando Scariolo lo estime oportuno. Y sin conocimiento de causa ninguno, llego a leer entre líneas que Pau Gasol, compañero del hispano-montenegrino en los Bulls, ha tenido mucho que ver en esa decisión.

Que la relación entre Mirotic y la FEB estaba rota lo sabe hasta el Tato, y que parecía no haber reconciliación posible también lo sabíamos todos, al menos esta se antojaba harto complicado. Ambas partes necesitaban un mediador para hacer las paces y predicar “aquí no ha pasado nada, pelillos a la mar”.

Ese mediador tenía que ser alguien de peso dentro de la FEB, no podía ser un cualquiera y tampoco nadie que en el pasado le hubiese echado bastante mierda a Mirotic para justificar la presencia de Ibaka y de paso parecer el bueno de ese guión protagonizado por el ex del Real Madrid y José Luis Sáez como cabeza más que visible de la Federación.

De ahí que tenga claro, mejor dicho cristalino, que Pau Gasol ha sido esa persona que ha ido limando asperezas hasta conseguir el “si quiero” de Niko, que de paso le permitirá debutar con nuestra selección el próximo verano, porque nadie se creerá que después de esa declaración a los cuatros vientos Mitoric se quede sin jugar el Eurobasket.

Pau Gasol es un tío que transmite fuera la pista una de las cualidades que le hacen ser determinante sobre el parquet, inteligencia. Pau ha sabido leer los tiempos que tocan y tocarán dentro de la selección en los próximos años, y sabe que después de su marcha de la selección, junto con algunos más que han conformado el núcleo duro de España, esta selección podría volver a un pasado casi olvidado, no aspirar a medallas y vivir de muy en vez en cuando algún que otro éxito. De ahí que haya cogido ‘el toro por los cuernos’ para convencer a Mirotic, comiéndole el coco en el vestuario y cada entreno para que sea uno de los nuestros de una vez por todas, aunque siempre lo fue para los aficionados,  y solo faltaba que la FEB lo acogiera de tal forma.

Pau ha tenido toda una temporada para vivir en vivo y en directo las evoluciones como jugador de Mirotic, conocerle como compañero, forjar una más que posible amistad y comprobar que su liderazgo será imprescindible en el futuro para que nuestra selección pueda realizar con tranquilidad el período de transición tras su marcha, para que la selección gire en torno a Niko, y seguramente así se lo ha hecho saber a José Luis Sáez. “Pepe, este chaval no es que sea necesario en los próximos años, es que será imprescindible si queremos seguir escribiendo páginas de gloria para nuestro combinado y país”, seguro que no serían esas las palabras exactas o ni tan siquiera se acercan, pero a buen seguro Pau habrá tenido alguna que otra charla larga y tendida con José Luis Sáez sobre la necesidad de contar de una vez por todas con Mirotic para la selección.

Lo que Mirotic puede ofrecer a la selección lo sabemos todos, no vamos a descubrirlo ahora. Hacía tiempo que España no tenía un cuatro tirador, desde la retirada de Garbajosa, que abriera el campo y dejara espacios para los hermanos Gasol y ahí Niko puede ser determinante. Además de poder jugar perfectamente al lado de cualquiera de los Gasol, cosa que no ocurría con Ibaka. No se podía convocar a Ibaka para que hiciera de Mirotic, como ha ocurrido en casi todas las citas, como tampoco se puede llevar ahora a Mirotic para que haga de Ibaka. Mirotic es Mirotic, con sus virtudes y defectos, e Ibaka es Ibaka también con sus cualidades y carencias.

Ahora solo falta un aspecto para cerrar el círculo completamente, que la FEB empiece a endulzar la llegada de Mirotic a la selección con algo de peloteo y adulación extrema a través de sus emisarios de la prensa porque ahora si es uno de los nuestros gracias a Pau, además de llevar la marca ÑBA que tanto gusta desde las altas esferas de la Federación por aquello de las giras recaudatorias.

Es tiempo de cambiar los afilados cuchillos por plumas o tecleos defensores a ultranza de Nikola Mirotic, porque a fin de cuentas se trata de no contradecir a la mano que mece la cuna.

0 comments :

Publicar un comentario